Un equipo de MIT Media Lab, el laboratorio de investigación del Instituto Tecnológico de Massachusetts, ha desarrollado esta app de realidad aumentada que facilita la conexión y administración de funciones de dispositivos y objetos inteligentes simplemente ejecutando este sistema.
Tres años de investigación por parte de un equipo del MIT Media Lab han dado como resultado Reality Editor, una aplicación (todavía en pruebas) que combina la tecnología de realidad aumenta con el Internet de las Cosas (IoT) y con la que es posible realizar numerosas funciones que se pueden programar y gestionar de manera muy sencilla en los distintos dispositivos inteligentes que se utilizan cada día con esta app.
Esta herramienta de código abierto y disponible para su descarga en App Store funciona, de momento en su versión en pruebas, con códigos QR que se pegan a los dispositivos y objetos físicos que queramos conectar y administrar.
Por ejemplo, basta con captar a través de la cámara de un smartphone el objeto en cuestión con el código QR y sus capacidades estarán visibles para trazar una línea virtual de un objeto a otro y conectarlos (ver vídeo adjunto).
Reality Editor muestra así todas las funciones del objeto en el móvil inteligente del usuario, que actúa a modo de panel de control, y que permite configurar y personalizar las funciones que se muestran a sus necesidades y crear así conexiones con otros dispositivos y objetos, otorgando el máximo control al usuario.
Los desarrolladores del MIT Media Lab han señalado que la evolución de esta aplicación híbrida de realidad aumentada e IoT pasa por integrar tecnología de reconocimiento de objetos para sustituir a los códigos QR que el sistema necesita actualmente, así como mejorar la coordinación espacial, para su sencilla y natural aplicación en el entorno doméstico y profesional.
Cada interfaz visual se basa en HTML5, por lo que aprovecha la potencia creativa de la web, de manera que Reality Editor transforma las tecnologías de navegación web intuitivas que se utilizan continuamente en una interfaz para el espacio físico, al tiempo que la conexión entre los objetos usa los estándares abiertos de Internet, definiendo acciones simples, cambiando la funcionalidad de los objetos que nos rodean y cómo interactúan.
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