El buscador, que sigue dando pistas sobre sus gafas de realidad aumentada, publica una serie de preguntas frecuentes donde responde a las principales dudas que puedan surgir sobre su funcionamiento.
Con la conferencia anual de desarrolladores de Google cada vez más cerca, el buscador desvela cada vez más detalles sobre su proyecto estrella para animar a los desarrolladores a crear un potente ecosistema de aplicaciones alrededor de sus gafas de realidad aumentada.
Tras publicar algunos detalles técnicos y el código fuente del dispositivo, ahora le llega el turno a las preguntas frecuentes. Así, la página que Google ha habilitado explica que Glass «no pueden ser utilizadas por todo el mundo». De hecho, el dispositivo no es recomendado para los usuarios que hayan sido operados por láser ni para los menores de 13 años.
Aunque no existen explicaciones muy detalladas, Google advierte que las gafas podrían causar dolores de cabeza o estrés de ojos «como sucede con las gafas convencionales». Los más pequeños, que «podrían romper las gafas o hacerse daño», no pueden registrarse en Google hasta que cumplan 14 años, condición indispensable para utilizar el dispositivo.
Otras advertencias apuntan hacia el uso de las gafas, ya que «todo tiene un momento y un lugar». Por ejemplo, el usuario tiene que ser consciente de que a su alrededor puede haber gente que no quiera ser grabada o fotografiada, como puede suceder en la sala de espera del médico. De igual forma, su uso durante la conducción de un vehículo está prohibido en todos aquellos lugares que no permitan el uso de un teléfono móvil al volante de un auto.
Naturalmente, el buscador también desaconseja un uso de sus gafas mientras se realiza submarinismo, deportes de riesgo, algún experimento con sustancias químicas o estar utilizando un martillo neumático. Así, el buscador deja bien claro que sus gafas «no son indestructibles», aunque sí «resistentes y cómodas».
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