El concepto de realidad aumentada alguno le pueda sonar un poco extraño todavía, pero nada más lejos de la realidad.
La aplicación Layar nos permite reconocer un logo con la cámara de nuestro teléfono y nos redirige a con pestañitas alrededor de este hacia el sitio que la empresa reconocida quiera. Podemos entrar en su página web, ir directamente a comprar sus productos o simplemente marcarnos donde los podemos comprar.
Quizá esto parezca simple, pero falta poco para que Google nos vuelva a sorprender, esta vez será con sus gafas. Dichas gafas nos permitirán conectarnos a internet y realizar todo tipo de cosas. Ellas solas reconocerán todo lo que vean, sean edificios, logos, coches o incluso personas de nuestra agenda. Nos guiarán mientras andamos por la calle mediante el GPS, o chatearemos con nuestros amigos mientras vamos en bicicleta. Estas son unas de las pocas opciones que nos ofrecerá esta maravilloso producto. Hoy quizá nos pueda parecer un poco lejano que nuestros dispositivos móviles evolucionen tan rápido, pero la tecnología va a dar un paso gigantesco con el descubrimiento del grafeno. Este hecho es quizá solo comparable a la utilización del carbón en la revolución industrial o el del petróleo.
El silicio va a pasar a la historia, el grafeno se va a imponer. Es mejor conductor, más ligero, flexible y barato.
Quizás aquellas películas empeñadas en hacernos saltar al futuro se puedan equivocar o no, lo que está claro que la revolución tecnológica no ha hecho más que empezar. Es mucho más fácil hablar sobre el pasado, por eso a tantos genios visionarios que acertaron y erraron en sus películas o libros, llámese Julio Verne, Spielberg o Kubrick, gracias por hacernos soñar.
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