domingo, 3 de abril de 2016

La realidad aumentada


Después de la cantidad de avances que se han producido a nivel tecnológico, es difícil pensar que a estas alturas haya algo que pueda sorprendernos. Sin embargo, la tecnología sigue avanzando y cada día surgen nuevos proyectos que desafían las leyes de nuestra realidad.
Este es el caso de la Realidad Aumentada (RA), término que, aunque actualmente no está demasiado extendido, tiene cada día más cabida en nuestra vida. El funcionamiento de la RA se basa en combinar el entorno real con elementos virtuales. Eso es precisamente lo que la diferencia de la Realidad Virtual, que no aísla del entorno físico, sino que combina ambos para hacer de ella una experiencia más en consonancia con nuestra propia realidad.
Para hacer posible la RA son necesarios cuatro elementos: una pantalla donde visualizar la imagen, una cámara, que recoge la información del entorno físico y la transmite al virtual (en la pantalla), los marcadores, una especie de símbolos que al ser descifrados se traducen en una imagen determinada, y el software, encargado de interpretar estos símbolos.
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Así, gracias a la RA podríamos ver (utilizando los marcadores adecuados) un dragón sobre la cama, o la luna en la encimera de la cocina.
Es decir, la RA es capaz de transformar nuestro entorno físico en un entorno digital e interactivo.
Compañías tecnológicas tan relevantes como Facebook, Samsung o Apple invierten en este tipo de avances.Microsoft, por ejemplo, ha mostrado hace unos días su nuevo producto, que salió en la preventa a finales de febrero.
Cuando estén al alcance del público, las gafas Hololens permitirán apreciar imágenes tales como un modelo anatómico en 3D, los órganos del cuerpo humano o la galaxia al completo sin necesidad de moverse de casa.
Actualmente los usuarios pueden hacer uso de la RA para ver un catálogo de productos en 3D, jugar a juegos o utilizar aplicaciones móviles.
Uno de los ejemplos más antiguos es Ingress, un juego de Google que, mediante el uso de Google Maps, permite a los usuarios encarar el papel de un agente secreto que completa misiones, recoge ítems, conquista territorios y desbloquea logros al tiempo que recorre su ciudad, o las que vaya visitando.
La RA también tiene cabida en aplicaciones tan utilizadas como el Snapchat, que permite tomar fotografías que se alteran a tiempo real de formas tan diversas como poniéndose maquillaje, o haciendo salir un arcoíris de la boca del retratado.
Muchos como Brian Mullins, presidente ejecutivo de Daqri, o el grupo Goldman Sachs, pronostican que en unos años la realidad aumentada generará enormes beneficios y formará parte de nuestro entorno, hasta el punto de necesitarla para poder desarrollar nuestro día a día con normalidad.
Elena Chozas
Redacción

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