Pulseras que detectan ataques epilépticos, joyas que avisan de una elevada exposición al sol y el lanzamiento de Apple Watch son algunos de los hitos en tecnología móvil en este año
En 2014, el tema más popular dentro de la tecnología móvil fue la introducción de aparatos portables capaces de hacer un seguimiento de cosas como convulsiones o la cantidad de luz solar que recibes. Los fabricantes de dispositivos, grandes y pequeños, intentaron diseñar portables funcionales y a la moda.
Seguidores de actividad como el Fitbit y el Jawbone Up siguen constituyendo la gran mayoría de dispositivos usados en el cuerpo, pero las empresas incrementaron sus esfuerzos por sacar relojes inteligentes en 2014. LG y Samsung lanzaron relojes con Android Wear, una nueva versión de software para móviles del sistema Android de Google hecha a medida para la electrónica portable. Por su lado, compañías como Pinterest, Airbnb y Groupon diseñaron aplicaciones para estas pequeñas pantallas.
La presentación de reloj inteligente de más alto perfil este año vino de la mano de Apple en septiembre. El primer dispositivo portable de Apple es más elegante y está diseñado más cuidadosamente que la mayoría de los relojes inteligentes. Tiene una pantalla táctil sensible a la fuerza y un dial en el lateral para desplazarse y hacer zoom. Sin embargo, el dispositivo, que costará 349 dólares (unos 286 euros) en su configuración más barata, no estará disponible hasta principios del próximo año y Apple esperó hasta noviembre para lanzar WatchKit, el conjunto de herramientas y reglas para desarrolladores.
Aunque los relojes inteligentes en particular a menudo agrupan un montón de características en poco espacio, este año algunos fabricantes de portables evitaron un exceso de prestaciones para favorecer la simplicidad, en un intento por atraer a los consumidores. La compañía francesa Netatmo lanzó June, un dispositivo parecido a una joya sobre una pulsera de cuero: hace un seguimiento de la exposición al sol del usuario y funciona con una aplicación para el iPhone que te dice cuándo tienes que ponerte un sombrero o buscar sombra. La empresa de Hong Kong ConnecteDevice lanzó un sencillo reloj inteligente llamado Cogito con una cara analógica de aspecto tradicional, pero que también muestra algunas notificaciones.
Este año también hubo un mayor énfasis en el seguimiento biométrico de precisión. En noviembre, la start-up Empatica anunció una pulsera llamada Embrace, diseñada para personas con epilepsia. Puede hacer un seguimiento de las convulsiones y funciona con una aplicación de teléfono inteligente para comunicarle a un miembro de la familia si estás teniendo un ataque. El dispositivo combina datos recogidos por el acelerómetro y giroscopio con mediciones de conductancia de la piel (recogida a través de pequeños electrodos en el interior de la correa del reloj), que aumenta durante las convulsiones, según señala la directora científica y profesora del Media Lab en el MIT (Instituto de Tecnología de Massachusetts, EEUU), Rosalind Picard. Se espera que la pulsera esté disponible el próximo verano por 199 dólares (unos 160 euros).
A pesar de la inmensa popularidad de la muñeca, este año otras empresas han lanzado portables para otras partes del cuerpo en un intento por hacer que la tecnología sea íntima pero al mimo tiempo útil y cómoda. La start-up OMsignal, por ejemplo, comenzó a vender camisas con electrodos incorporados para poder hacer un seguimiento de tu frecuencia respiratoria y cardíaca. Un dispositivo que se coloca en el bolsillo de la camisa captura esta información, junto a tus movimientos, y puedes ver los detalles en una aplicación para iPhone.
Aún así, los dispositivos portables de todo tipo, y en particular los que se colocan más cerca de la cara, como las gafas inteligentes, tienen un largo camino por recorrer antes de que sean ampliamente aceptados.
Un claro ejemplo de este camino hacia la aceptación, lleno de baches, podría ser Google Glass, el dispositivo que se coloca en la cabeza y lleva una pequeña pantalla, dado a conocer en 2012 como dispositivo experimental y que todavía no ha sido lanzado como producto de consumo. Google mantiene su compromiso con Glass, pero a finales de 2014 el dispositivo parecía estar en declive a medida que sus primeros usuarios, que pagaron 1.500 dólares (unos 1.225 euros) por él, comenzaron a perder interés, y compañías como Twitter dejaron de trabajar en aplicaciones para el sistema.
Al margen del destino de Glass, el mercado de los portables va a seguir creciendo, impulsado por la inminente llegada de Apple Watch y otros nuevos dispositivos. Convencer a los consumidores de que compren y utilicen estos dispositivos requerirá mucho más trabajo en cuanto a diseño, tecnología de miniaturización y aplicaciones de éxito masivo. Probablemente, estas serán las principales áreas de interés para los encargados de crear portables el próximo año.
0 comentarios :
Publicar un comentario