En diálogo con Letra P, los cofundadores de la consultora “Atlas” explican las ventajas de la incorporación de tecnología en la cotidianidad de la gestión y la administración pública.
Es un lugar común, pero también es una realidad ostensible para cualquier persona: la tecnología llegó para quedarse en la vida política. La programación, las redes sociales y las tecnologías de la información son citadas hasta el hartazgo por los dirigentes políticos como las “herramientas” del futuro para que el trabajo cotidiano de los gobiernos.
Pero, qué tanto se aprovechan estos recursos en la gestión y en la administración pública. Letra P entrevistó a Ignacio Argonz e Ignacio Lamothe, cofundadores de la consultora Atlas, que brinda servicios de consultoría estratégica adaptada a las necesidades de gobiernos y empresas con “una mirada integral e innovadora para el desarrollo de ciudades inteligentes”. En diálogo con este medio, ambos explican qué es una ciudad inteligente y cuál es el vínculo de los gobiernos de la Argentina en torno a estas oportunidades que brinda la tecnología para la gestión y el vínculo con la ciudadanía.
-¿Qué es un Smart City o Ciudad Inteligente?
Ignacio Argonz: (IA) Cuando uno piensa en una Smart City lo primero que imagina es una ciudad automatizada y tecnológica, que usa las TIC para ser más eficiente en el uso de sus recursos y en el cuidado del medio ambiente. Desde nuestro punto de vista, entendemos que las ciudades inteligentes no son sólo ciudades netamente tecnológicas, sino aquellas que son amigables con el ciudadano, vivibles.
Ignacio Lamothe (IL): Aquellas que toman decisiones de manera participativa y transparente, que invierten en movilidad para hacer más fácil el desplazamiento por la ciudad, que optimizan la prestación de servicios, y que a la vez, son inclusivas y fomentan la competitividad económica.
-¿Buenos Aires es una Ciudad Inteligente?
IL: La Ciudad de Buenos Aires está invirtiendo en algunos de estos conceptos que la hacen un poco más inteligente. Las políticas de movilidad como la del metrobus, incentivar medios no motorizados a través de infraestructura como bicisendas o créditos blandos para comprar bicis es un camino. Por otro lado, veo iniciativas interesantes como plataformas de datos abiertos a la ciudadanía y políticas que fomentan el emprendedurismo y el talento.
IA: En este sentido, esta semana se llevando a cabo en todo el país la semana del co working, con distintos talleres y charlas que permiten a los participantes encontrarse, colaborar en proyectos innovadores y bajar los costos iniciales de emprender. Pero lamentablemente estos aciertos a veces no llegan a todos los sectores de la ciudad.
-¿De qué manera la tecnología puede ayudar a la gestión pública? ¿Y a los vecinos?
IL: Los avances tecnológicos por lo general siempre ayudan a la gestión pública en tanto y en cuanto estén enfocados mejorar la relación entre el gobierno y los ciudadanos y la calidad de vida en una ciudad. Cuando analizamos cómo se fueron dando los procesos de construcción de ciudades inteligentes en el mundo, vemos que muchas comenzaron tomando decisiones para controlar recursos y gastos en servicios. Aplicaron soluciones puntuales para resolver problemas concretos y sobre el éxito de esas iniciativas planificaron el desarrollo de ciudades que hoy conocemos como Smart City.
-¿En qué puede avanzar la Ciudad de Buenos Aires en esta materia?
IA: Creemos que en la medida en que se vayan introduciendo más herramientas de base tecnológica en la gestión que ponga en el centro de la escena a los ciudadanos, mejorando procesos, tiempos y recursos, los efectos de ir hacia una ciudad más inteligente se irán materializando.
IL: Sin embargo, vemos que el verdadero desafío para la Ciudad será enfocar este proceso para que sea inclusivo y participativo a todos los sectores, potenciar los aciertos en los barrios que hoy no están accediendo de la misma forma los mismos derechos a la ciudad. Otro gran desafío es coordinar estar iniciativas con las distintas jurisdicciones del área metropolitana.
-¿Qué puede hacer el Gobierno de la Ciudad en materia de incorporación de tecnología y digitalización de la gestión pública?
IA: El gobierno de la ciudad tiene múltiples desafíos que podría resolver con soluciones de base tecnológica. Uno de los más importantes hace a la movilidad y al transporte de los porteños. Su experiencia de viaje es mala, sobre todo cuando suceden hechos inesperados como cortes en los subtes, manifestaciones o eventos. El gobierno de la ciudad podría por ejemplo abrir la información relativa a los servicios de transporte público para que desarrolladores individuales generen soluciones colaborativas de software que optimicen el uso de la red de transporte. Otro desafío significativo es el del estacionamiento medido y los trapitos.
IL: En la actualidad existen soluciones de aplicaciones que gestionan de manera eficiente el estacionamiento en las ciudades y que son inclusivos y formalizan la actividad de los trapitos. Estas alternativas además de ordenar el tránsito y el estacionamiento generan fuentes de trabajo formal y aportan seguridad en la vía pública. Hay algunos casos exitosos en ciudades de Chile y en otras ciudades Argentinas.
-¿Cómo ven que el Gobierno de la Ciudad haya creado un Ministerio de Modernización, Innovación y Tecnología?
IA: Vemos como una iniciativa interesante que exista una cartera que potencie estos temas, que los ponga al servicio del ciudadano y coordine políticas para el resto de las áreas del gobiern. Además, se creó la Subsecretaría de Ciudad Inteligente. Si bien la ciudad de Buenos Aires es la que más avanzada está comparativamente en el proceso de construcción de una ciudad inteligente, no es la única. Hay muchas ciudades intermedias del país que están planificando este tipo de políticas y se destacan en acciones concretas. Bahía Blanca, Villa María o Rafaela son algunos ejemplos. La agenda de la modernización de la gestión pública y de las ciudades inteligentes se instaló en todo el país como consecuencia del mayor acceso a las nuevas tecnologías entre los ciudadanos, quienes exigen mejores y más ágiles servicios a sus gobiernos.
-Ustedes ofrecen servicio de "Realidad Aumentada" a municipios, que es la misma tecnología del juego Pokémon Go. ¿Cómo se aplicaría esta herramienta en la gestión municipal?
IL: La realidad aumentada (RA) modifica totalmente la forma en que estábamos acostumbrados a interactuar con las cosas del día a día en nuestro entorno. Situaciones tan cotidianas como caminar por las calles de nuestras ciudades, elegir un menú en un restaurante, conocer la oferta cultural o un sitio de interés turístico se convierten en experiencias distintas a partir de la RA. El fenómeno de Pokemon Go masificó y le dio publicidad a esta tecnología entre los usuarios de todas las edades. En la gestión pública, esta herramienta tiene distintos ámbitos de aplicación posible.
IA: El más común es en las áreas de turismo y cultura, facilitando la creación de circuitos turísticos georeferenciados y dando la posibilidad de tener guías virtuales y exclusivas en un smartphone. También posibilita, entre otras, destacar con información interactiva o 3D sitios de relevancia histórica, edificios, obras de museos, estatuas en la vía pública o el arbolado de una ciudad.
VIAJE A BARCELONA. La compañía Atlas organizó un viaje a la exposición mundial de Smart City en Barcelona, que se realizará desde el 13 al 19 de noviembre y en la que participarán intendentes, funcionarios municipales, provinciales y gobernadores.
Se trata de la feria más importante del mundo sobre ciudades inteligentes donde se encuentran especialistas, empresas y gobiernos de todo el mundo a conocer las últimas tendencias en innovación para ciudades. Durante esa semana, se reunirán con otros alcaldes, especialistas y empresas de punta en la temática, como por ejemplo el cluster de eficiencia energética de Cataluña, el cluster de Smart Cities de Barcelona y la Universidad Autónoma de Barcelona.
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