A través de cámaras cenitales y sensores de movimiento se podrá limitar la cantidad de gente en los locales, la distancia entre ellos y su temperatura corporal
En el marco de la búsqueda de soluciones para volver a hacer vida normal lo más pronto posible, Beabloo, empresa española líder e innovación y tecnología, ha desarrollado «Interaction Care», un producto que pretende ayudar a los comercios españoles a controlar de manera más efectiva y minuciosa que dentro de sus locales se cumplan las medidas sanitarias necesarias para prevenir el contagio de Covid-19.
Partiendo de tecnologías de sensorización y cámaras cenitales, esta nueva herramienta da la capacidad de visualizar la distancia entre las personas cada cuarto de segundo y así evaluar situaciones de riesgo de contagio. Asimismo, se desarrollaron mapas de calor en tiempo real para que, al final de la jornada, los responsables de los comercios puedan saber en qué parte del local se produjo la mayor concentración de personas y así poder reforzar las labores de desinfección en esas áreas.
Otra de las funciones que vienen integradas en «Interaction Care» tiene que ver con la detección aproximada del rango de edad de los clientes para saber si alguien pertenece al grupo de personas en
riesgo. También se agregó un detector de mascarillas y cámaras termales que pueden detectar si alguna persona dentro del establecimiento tiene una temperatura corporal alta y así enviar un aviso al «staff».
Jaume Portell, CEO y co-fundador de la compañía, ha detallado que este producto vendrá incluido dentro de sus paquetes y no tendrá un costo adicional. «No buscamos sacarle provecho comercial, queremos ayudar y aportar nuestro granito de arena», agregó Portell. Ha comentado también que actualmente están trabajando, en conjunto con Microsoft, en el desarrollo de una «app» móvil de realidad aumentada para detectar en tiempo real la ocupación del lugar. Esta función está disponible para los clientes de Beabloo a través de correo electrónico a nivel «web», pero la aplicación aun no está terminada.
Por otra parte, Portell también ha explicado que el sistema está contemplado para proteger los datos y la privacidad tanto de los clientes como de los empleados. «Las cámaras no guardan información personal, no se graban las caras. Al final del día se manejan las estadísticas de hora y lugar del local en que se produjeron más aglomeraciones», ha confirmado.
La iniciativa ya está en uso
«Este producto ya está siendo utilizado con algunos de los clientes que han podido mantenerse abiertos durante la crisis sanitaria. Un ejemplo de ellos es el nuevo aeropuerto de Estambul», ha confirmado Portell mientras explicaba que es una herramienta que se puede aplicar en diferentes comercios como hoteles, restaurantes, tiendas de moda, entre otros. «Es el mismo algoritmo, solo cambia el cómo aplicarlo».
La directiva de Beabloo se ha mantenido en contacto con el Gobierno de España para colaborar en lo que a comunicación digital y prevención se refiere. Desde la empresa han comentado que su objetivo principal es proteger a los empleados que durante este confinamiento han seguido trabajando para que los demás puedan acceder a alimentos y productos básicos. «Se trata de levantar esta situación lo antes posible, esa es la prioridad», ha afirmado Jaume Portell.
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