El fracaso inesperado de Magic Leap y su realidad aumentada

Cuando tus pretensiones son de alcanzar un volumen de ventas de 100.000 unidades en seis meses y durante ese periodo de tiempo acabas vendiendo solo 6000, te das cuenta de que has fracasado. Es lo que ha ocurrido con Magic Leap, las gafas de realidad aumentada que apuntaban muy alto y que estaban arropadas por una selección de inversores y profesionales de la industria que, en primera instancia, sorprendió.

Pero es posible que la realidad aumentada todavía no esté en su momento álgido y que esto haya jugado en contra de Magic Leap. Y decimos «es posible» por ser generosos, dado que está muy claro que no es el momento para este tipo de producto. Otras marcas más conocidas como Apple o Facebook también están trabajando en sus propias propuestas y si todavía no están en el mercado posiblemente se trate por un buen motivo.




El estudio de mercado es importante y en ocasiones los fabricantes deciden retrasar sus lanzamientos porque saben que si los ponen a la venta antes de tiempo se tropezarán y no habrá manera de rascar ventas. Ocurrió con la realidad virtual y es obvio que también está pasando con la realidad aumentada. Pero Magic Leap decidió no hacer caso a las pistas que le daba el mercado y no esperar para poner a la venta su producto.

Las consecuencias han sido terribles. Esas seis mil unidades vendidas en seis meses dejan a la compañía con un stock de producto que posiblemente asuste. Al mismo tiempo, las rondas de despidos ya han comenzado en la empresa y las oficinas se están convirtiendo, en cierta manera, en un campo de batalla. Muchos de los grandes ejecutivos que se encontraban detrás de la plataforma, tanto dirigiendo como invirtiendo, se están retirando. El mismísimo Sundar Pichai, CEO de Alphabet, ha abandonado la compañía. Y todo ello lleva a una situación crítica que por supuesto no se resolverá lanzando una nueva versión de Magic Leap.

No obstante, parece que la empresa dedica los recursos que le quedan en fabricar la segunda generación de Magic Leap. Eso sí, este sucesor se encuentra todavía a varios años de separación de su lanzamiento. Los planes incluyen que tenga conectividad 5G, que ofrezca un mayor campo de visión y que solucione algunos de los problemas de la primera versión, como su volumen y el peso del que hace gala. Todo ello, eso sí, tendrá que esperar. Porque ya sea por la presión de la crisis o porque han aprendido la lección, en Magic Leap han decidido esperar a que llegue el momento de la realidad aumentada.