Aplicaciones basadas en realidad aumentada que desarrolla la DGTIC permiten reproducir procesos o fenómenos para facilitar su estudio.
La realidad aumentada, que surgió en la década de los noventa, incorpora objetos o escenas virtuales al entorno material, los cuales son observables a través de un dispositivo que reconoce un patrón de líneas, imágenes o colores.
Pedro Becerril, quien es programador de ambientes 3D en esta dependencia, señaló que cualquier teléfono móvil con una cámara de dos mega pixeles es suficiente para ver e interactuar con estos recursos de TIC.
Los objetos o escenas virtuales pueden incluir textos, imágenes fijas, animaciones o sonido. Su nivel de interacción depende del diseño, pues su manipulación es posible incluso con el control de un videojuego.
Entre los proyectos realizados por la DGTIC con esta tecnología se encuentra un modelo para simular la construcción de una habitación, el cual se desarrolló a petición de la Facultad de Arquitectura.
La dependencia también ha creado diversos recursos para la divulgación, como la Galería del Instituto de Biología, que permite visualizar arácnidos y mamíferos, entre ellos una ballena en su hábitat.
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